sábado, 15 de enero de 2011

Amigo

Tú que te muestras inocente, desnudo y puro,

No sabes que en mi mente yo crezco y mudo

Mil sabores ansiando la calidez de tu cuerpo,

Te veo y ardo y me consumo luego

En la gruta oscura de un sendero oscuro.

Tu que atas a mi amistad tus sueños,

No sabes que cae como misterio nuevo

La mañana ingrata que me crea amores,

Y se tiñe el día de adustos colores,

Y se parte el alma como friable huevo.

Ya te amo y miro y el limo me excede,

La lánguida sonrisa que el dolor envuelve,

Y en esa telaraña de tristes colores,

Yace el alma de de quien como amigo no te quiere

Y ruega silente, tu amor de hombre.